Estudiando japonés

Luis se encontraba llegando a su casa emocionado ya que por fin encontró dónde estudiar japonés, lo que lo hizo comenzar a irse preparando mientras había comprado un libro de Kanjis donde se le permitiría practicar su caligrafía, una vez lo abrió tomo una pluma y comenzó a practicar con una ardua molestia ya que no era particularmente bueno, lentamente sus dedos fueron volviéndose finos y delgados mientras sus uñas cada vez se notaban más arregladas pero Luis no lo notaba ya que estaba muy concentrado.

A la vez que su letra mejoraba gradualmente, la masa muscular de sus brazos comenzaba a esfumarse para dar paso a brazos delgados y de una piel fina y lechosa. En el momento que llegó al Kanji 髪 (cabello) comenzó a sentir una comezón enorme en su cuero cabelludo el cual poco a poco terminaba en una cascada de cabello castaño bien arreglado y amarrado con un broche de moño. 

En el momento que Luis noto su cabello largo, asustado observó sus manos y brazos "Que demonios es esto?!" Grito mientras pensaba como es que acabo así para que inmediatamente sus manos fuera de si empezarán a seguir con los Kanjis sin poder detenerse, asustado comenzó a sentir como su rostro comenzaba a moverse, crujiendo su nariz hasta hacerla pequeña y fina, sus labios comenzaban a burbujear hasta volverse unos labios grandes y besables hasta volverse completamente un rostro femenino asiático.  

Asustado e intentando detenerse llegó al Kanji 胸 (pecho) el cual, al verlo lo reconoció inmediatamente por su gusto por el anime "No no no!" Grito mientras se daba cuenta que su voz se había tornado dulce y femenina, mientras su busto comenzaba a burbujear y crecer, forzandolo a jadear, logrando que con cada respiro su busto creciera de golpe hasta que esté llegará a ser una de copa C, asustado y logrando mover sus manos para ver sus nuevos atributos, intento pedir ayuda pero de su boca únicamente salía una mezcla de japonés y español para posterior seguir adelante con su libro de Kanjis. 

Comenzó a sentir como sus caderas crujían mientras su cintura parecía ser apretada por un corset mientras toda la grasa de su cuerpo era dirigida hacia su trasero, tomando lentamente la forma de un corazón con unos muslos gruesos y grandes los cuales apretaban su hombría mientras lentamente parecía ser absorbida.

Llegando casi al final del libro, sus ropas comenzaron a cambiar dónde su pantalón y camisa se fusionaron lentamente para acabar siendo un vestido blanco de una sola pieza junto a una pequeña corbata de color negro, sus zapatos comenzaban a cambiar a unos tacones negros y lentamente sus memorias comenzaban a cambiar después de un horrible dolor de cabeza "Ahh, ya acabe de estudiar para mis exámenes así que supongo merezco un descanso" comentaba Ayaka mientras soltaba la pluma y se levantaba de su asiento para salir a divertirse